
Los Retrocesos de Abinader en su Gobierno: Un Análisis de las Iniciativas Retiradas
Durante su mandato, el presidente Luis Abinader ha buscado implementar una serie de reformas clave para modernizar la estructura estatal de la República Dominicana. Sin embargo, diversas circunstancias, como la presión social, falta de consenso político y críticas desde distintos sectores, han obligado a su administración a dar marcha atrás en varias iniciativas. Estos retrocesos han sido tema de debate público, especialmente en momentos en que se intentaban realizar cambios profundos en áreas sensibles como la fiscalidad, los derechos laborales, el sector eléctrico y la política migratoria.
Reforma Fiscal y Proyecto de Ley de Modernización Fiscal
Uno de los episodios más recientes y significativos fue la retirada del proyecto de Ley de Modernización Fiscal, que pretendía reformar el sistema tributario del país. La propuesta, que incluía la eliminación de exenciones fiscales y el aumento de impuestos, generó un fuerte rechazo por parte de la sociedad dominicana, la cual se expresó mediante protestas y cacerolazos frente al Congreso Nacional. El presidente Abinader, ante la falta de apoyo popular y las críticas generalizadas, decidió retirar el proyecto para evitar una crisis social mayor.
Este intento de reforma fiscal no fue el primero. En octubre de 2021, el gobierno también exploró la posibilidad de introducir una reforma tributaria como parte del “diálogo por las Reformas”, pero después de múltiples críticas y la oposición de sectores empresariales y políticos, Abinader decidió no avanzar con la propuesta. Este retroceso demostró la dificultad de implementar una reforma fiscal en un contexto de desacuerdos entre los principales actores económicos y políticos del país.
Fideicomiso de la Central Termoeléctrica Punta Catalina
Otro importante retroceso se produjo con el fideicomiso de la Central Termoeléctrica Punta Catalina. A pesar de haber sido aprobado por la Cámara de Diputados en enero de 2022, el fideicomiso fue suspendido después de recibir duras críticas de diversos sectores que cuestionaban la transparencia y los fines del acuerdo. La controversia giraba en torno a la participación de la Fiduciaria Banreservas y la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) en la gestión del patrimonio de la planta eléctrica. El presidente Abinader solicitó al Congreso aplazar el conocimiento del contrato hasta que el Consejo Económico y Social (CES) pudiera recibir las opiniones necesarias para encontrar una solución más transparente y adecuada.
Proyecto de Ley contra la Ciberdelincuencia y Proyecto de Trata y Tráfico Ilícito de Migrantes
El ámbito de la legislación también ha sido un área donde el gobierno ha tenido que retroceder. En el caso del proyecto de Ley contra la Ciberdelincuencia, Abinader instruyó su retiro del Congreso tras recibir duras críticas por parte de la sociedad civil, que consideraba que algunas de sus disposiciones restringían la libertad de expresión, al penalizar ciertas publicaciones con hasta cuatro años de prisión. Este proyecto generó un amplio debate sobre los límites entre la lucha contra los delitos cibernéticos y el respeto a las libertades civiles, por lo que el gobierno optó por retirarlo para revisar su contenido.
De manera similar, el proyecto de ley sobre Explotación y Tráfico Ilícito de Migrantes también tuvo que ser retirado en febrero de 2023 debido a la fuerte oposición social. Este proyecto fue sometido al Congreso en medio de las festividades navideñas y proponía medidas controversiales en torno a la regularización de las víctimas de trata. Aunque el gobierno intentó justificar la necesidad de la ley, el presidente decidió retirarla para buscar un mayor consenso público.
Aumento de Tarifas Eléctricas y Resolución de Restricción Salarial
Las políticas económicas de la administración de Abinader también han enfrentado serios desafíos, como lo fue la suspensión del aumento de tarifas eléctricas, en respuesta a las quejas de la ciudadanía por las elevadas facturas y los apagones constantes. En medio de una crisis económica, el presidente decidió detener las próximas alzas tarifarias «hasta que cambien las circunstancias económicas en el país». Esta decisión fue vista como una victoria para los consumidores y marcó un punto de inflexión en la política energética de su administración.
Por otro lado, la resolución del Ministerio de Administración Pública (MAP) y la Dirección General de Presupuesto (Digepres) que limitaba el ingreso de personal y los ajustes salariales en la administración pública también generó descontento, especialmente entre los miembros del Partido Revolucionario Moderno (PRM), que esperaban ingresar al gobierno. Debido a la presión interna, el titular del MAP tuvo que aclarar que la circular no aplicaba a vacantes o reemplazos de personal activo, lo que suavizó el impacto de la medida.
Suspensión de los Carnets de Habitantes Fronterizos
Finalmente, uno de los retrocesos menos discutidos pero significativos fue la suspensión de la iniciativa para emitir carnets de “Habitante Fronterizo” a ciudadanos extranjeros que residen en zonas limítrofes con Haití. Este programa, que pretendía regularizar la entrada y salida diaria de estas personas sin intención de residencia, fue suspendido debido al rechazo de la población y la falta de apoyo político. La Dirección General de Migración anunció que la medida sería pospuesta indefinidamente, subrayando así otro ejemplo en el que el gobierno tuvo que recular ante las dificultades de implementación.
Conclusión
El gobierno de Luis Abinader ha enfrentado múltiples desafíos en su intento por modernizar el país. A pesar de sus intenciones reformistas, la presión social, la falta de consenso político y las críticas desde diversos sectores han obligado al presidente a dar marcha atrás en varias de sus iniciativas. Estos retrocesos reflejan la complejidad de gobernar en un contexto de profundas divisiones sociales y políticas, y resaltan la importancia del consenso para lograr cambios significativos en la República Dominicana.